El Traje Académico, también conocido como Capa y Batina, representa características de la vida académica como la confraternización, la igualdad, el respeto y la unión.
«Pero, ¿de dónde viene?» Fue en el siglo XVII que apareció el Traje Académico. La influencia de la Iglesia en la formación superior explica el origen del Traje en las Sotanas Eclesiásticas. Recordemos que hasta el siglo XVIII, la Iglesia era la responsable por la formación superior, incluida la vestimenta de los estudiantes. Por ejemplo, el número de botones del traje, los agujeros de los zapatos, los emblemas de la capa… son todos números impares. Esta curiosidad se explica por el significado de los números impares para la Iglesia católica: el 1 significa Dios; el 3, el número de la unidad y la trinidad; el 7, la perfección. Los números pares tienen simbolismo femenino, mientras que los impares tienen simbolismo masculino.
En 1957, cuando se publicó el primer Código de Praxe Académico, el traje pasó a considerarse un símbolo de igualdad, que no pretendía diferenciar clases y jerarquías: pasó a representar el respeto, la humildad y la fraternidad. El traje femenino apareció por primera vez en Porto en 1915. Actualmente, el Traje Académico sigue regulado por el Código de Praxe.
El Traje Académico masculino consiste en: Capa negra, sotana negra no eclesiástica, pantalón negro, chaleco negro, corbata negra, camisa blanca con cuello normal, calcetines negros, zapatos negros sencillos y gorro negro (opcional).
El Traje de la mujer es compuesto por: Capa negra, chaqueta negra, falda negra entallada, corbata negra, camisa blanca, medias negras y zapatos negros sencillos.
La tradición dicta que se vista el Traje Académico por primera vez en la noche de la Serenata Monumental de la Queima das Fitas… ¡El primer momento de una semana dedicada a la vida y a la fiesta académica!
La Capa del Traje se usa de diferentes maneras dependiendo de las circunstancias en las que se lleve: siempre va traçada sobre el hombro izquierdo; cuando se lleva en la espalda, debe tener algunos pliegues en el cuello, correspondiendo el número de pliegues al año del curso o al número de matrículas; en las serenatas debe ir completamente traçada; en la Misa se coloca en la espalda sin pliegues; las rasgaduras de la capa deben ser realizadas por personas importantes y los emblemas, cosidos en la parte inferior izquierda, en el interior de la capa, hacen referencia a aspectos importantes de la vida académica y de la vida personal.
No podíamos dejar de mencionar el «rasganço», una tradición de fin de curso con más de 700 años de antigüedad. Toda la ropa académica del estudiante es destrozada por familiares y amigos cercanos. Esta tradición representa y marca no sólo el final del curso, sino también de la vida académica en la «ciudad de los estudiantes», Coimbra.
El Traje Académico creado en Coimbra, se extendió a otras universidades portuguesas, con sus emblemas y la asociación de colores con los diferentes cursos de la Universidad. Se dice que inspiró a J. K. Rowling en la creación de las túnicas de los jóvenes magos de la saga de Harry Potter, ya que escribió el primer libro mientras vivía en Portugal.
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